Tiritas y apósitos
Las tiritas se han convertido en un elemento imprescindible, ya que los arañazos, heridas y cortes son habituales en el día a día, por lo tanto, un producto de este tipo nunca puede faltar en tu casa. Los apósitos cumplen una función esencial en los tratamientos de las heridas, ya que estos evitan que la zona afectada se infecte. En la actualidad, este producto ha evolucionado mucho, ya que hay tiritas de diversos tamaños, colores y diseños. Antes de que compres una, es recomendable que conozcas los tipos que hay, su modo de empleo y los factores a tener en cuenta antes de la adquisición.
Tipos de tiritas
En la actualidad, existen numerosos tipos de tiritas dependiendo del uso que se le vaya a dar. Son los siguientes:
• Apósitos de papel: Se emplean para pieles sensibles.
• Apósitos elásticos: Su diseño hace que se puedan ajustar a la forma de la piel en cada momento, permitiendo así una mayor movilidad.
• Apósitos corta-sangre: El tamaño de estos es más grueso y, además, tienen como función principal cortar el fluido de la sangre en una mayor cantidad que las de tipo estándar.
• Apósitos hidrocoloides: Sirven para los pies, ya que estos tienden a sufrir ampollas, rozaduras o durezas más que en otras partes del cuerpo. Su característica principal es que el líquido que expulsa la herida es absorbido de forma rápida por la tirita y, por lo tanto, la cicatrización es más rápida.
• Apósitos líquidos: Es la tipología más novedosa de todas. Su principal función consiste en formar una película protectora, transpirable y flexible alrededor de la herida. Esta característica permite aislarla de cualquier agente externo.
¿Cómo se utilizan los apósitos?
Antes de colocar la tirita, tienes que lavar y desinfectar la zona. Si no lo haces, se produce el efecto contrario, es decir, la posible suciedad existente se quedará atrapada en la zona afectada, detalle que provocaría una infección.
Una vez realizada esta acción, te recomendamos secar la herida con una gasa estéril. No utilices pañuelos o gasas sucias, además, tampoco uses estos elementos si han estado al aire libre.
A continuación, ya se puede colocar la tirita. Para ello, quita la funda protectora y tira de los dos lados para retirar la parte adhesiva. Recuerda no tocar la zona del apósito, ya que en ese caso se corre el riesgo de contaminar la herida y provocar una infección.
¿Cómo elegir la mejor tirita?
En esta categoría vas a encontrar apósitos de todos los tipos y con características muy diferentes. Para elegir la tirita adecuada, te vamos a dar una serie de consejos.
• Si tienes una herida y quieres bañarte, compra las que son resistentes al agua.
• En el caso de que tengas a pequeños en casa, adquiere las que tengan dibujos para que les sea más llevadero.
• Los apósitos se comercializan en diferentes tamaños y medidas, por lo tanto, compra los que sean adecuados para la zona afectada.
• Si las heridas o quemaduras son más profundas, también puedes adquirir las tiritas de tipo médico, ya que están elaboradas con silicona y, por lo tanto, reducen el grosor de la laceración