La menopausia es una etapa de la mujer, en que se dan muchos cambios. Este punto y aparte hormonal, pueda provocar algunos problemas de salud, normalmente leves. Esto pasa porque las hormonas son unas moduladoras excelentes de todos nuestras funciones vitales y su depleción conlleva todo tipo de modificaciones en nuestro organismo. Sofocos, sudores, insomnio y sequedad vaginal serán los efectos más comunes. Alivia estos trastornos con productos naturales, que te ayudarán a sobrellevarlo. 

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Climaterio y menopausia

Muchas veces son términos que se confunden y se fusionan, pero no son lo mismo y debemos diferenciarlas para saber a qué nos enfrentamos. Hay que tener en cuenta que tanto una como otra no son enfermedades, siendo parte de las fases naturales de la vida de una mujer.

El climaterio abarca todas las fases en que hay una disminución de la función hormonal sexual. Así, comprende la premenopausia, la menopausia y la postmenopausia. Desde el comienzo de la desregulación menstrual podremos hablar de climaterio, dándose una etapa de unos 3 a 5 años hasta que desaparece la regla. Una vez desaparece la regla durante 12 meses consecutivos se puede decir que estamos en la fase de menopausia.

Los síntomas serán diversos y más o menos presentes de forma individual, e irán cambiando de forma progresiva con el trascurso de los años:

Inicio del climaterio: Síndrome climatérico (sofocos, sudoración, palpitaciones, dolor de cabeza) y síntomas psíquicos (tristeza, emotividad, nerviosismo, disminución de la concentración).

Fase media: Atrofia genitourinaria, que provoca sequedad, dolor con las relaciones sexuales, incontinencia urinaria y tendencia a infecciones de orina.

A largo plazo: Osteoporosis y aumento de la incidencia de angina de pecho e infarto.

Suplementos para la premenopausia y menopausia 

Los problemas derivados de estas etapas son a raíz de la disminución de los estrógenos. De esta forma buscaremos el aumento de la actividad estrogénica mediante el uso de plantas con contenido en fitoestrógenos, compensando una parte de esta falta. Pero no será el único efecto que nos será útil. 

- Isoflavonas de soja: La madre de los fitoestrógenos. Ampliamente estudiada, avalando su efecto compensatorio suave y seguridad.

- Lúpulo: Relajante y con efecto estrogénico. Útil en insomnio y/o nerviosismo.

- Salvia: Con cierto efecto estrogénico y actividad antisudorífica, efectiva incluso fuera del ámbito de la menopausia.

- Ñame silvestre o Wild yam: Con efecto estrogénico. Típicamente se aplica vía tópica para su efecto sistémico.

Los productos con efecto estrogénico están contraindicados en cáncer estrógeno-dependiente.

Postmenopausia o problemas mayores

La osteoporosis es una enfermedad que tiene mucha más incidencia en la mujer que en el hombre en consecuencia del cambio hormonal que supone la menopausia. Los estrógenos ayudan a mantener la mineralización ósea, de manera que con su déficit comienzan las dificultades para la integridad de nuestros huesos.

Para prevenir esto, podemos utilizar las plantas comentadas con efecto estrogénico para comenzar. La soja tiene múltiples estudios sobre sus beneficios sobre el mantenimiento óseo. Tendremos que hacer hincapié en la dieta con el aporte de minerales y vitaminas imprescindibles para los huesos. Se puede recurrir a suplementos en caso de necesidad, siendo los componentes más importantes:

Calcio: Principal componente estructural del hueso, en forma de hidroxiapatita cálcica.

Vitamina D: Aumenta la absorción de calcio.

Vitamina K: Reduce la incidencia de fracturas.

Vitamina C: Necesaria para la formación del colágeno.

Otros minerales: boro, magnesio, zinc, cobre.

Tendremos que tener especial atención a nuestros hábitos. El ejercicio moderado, no tener bajo peso, reducir el consumo de sal, alcohol, café, no fumar serán medidas que mejorarán nuestra densidad ósea.

Para problemas cardiovasculares consulte nuestra sección circulación/tensión arterial y colesterol.

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