Nabo secado, típico de Japón. Elimina las mucosidades, los cálculos renales y residuos animales del cuerpo, por lo que conviene tomarlo con asiduidad, aunque basta una poca cantidad en cada comida.
Su uso es fácil: remojar unas pocas tiras de Daikon durante 5-7 minutos y tomarlo crudo o mezclado con ensaladas. También se hierve unos minutos en la sopa Miso o junto con las verduras.
Al poco de su uso, se observará la eliminación de mucosidades, lo cual es buena señal de purificación del cuerpo.
Los hábitos alimenticios modernos, con excesos de azúcares, frutas, grasas, carnes, harinas refinadas y aceites de baja calidad, producen abundantes depósitos de grasa en los órganos fundamentales y en los canales de los meridianos de energía, dificultando e incluso impidiendo la fluida circulación de ésta. En consecuencia, todos los órganos funcionan desequilibradamente.