CREMA FACIAL HIDRO-NUTRIENTE 250ML DULKAMARA BAMBOO

De formulación excepcionalmente suave, mejora la nutrición e hidratación de la piel sin obstruir la respiración percutánea, suaviza, afina el poro y embellece profundamente el cutis, aportando una excepcional y natural fragancia. Su contenido en Manteca de Karité y Espliego, conocidos protectores y emolientes naturales, Aceite de germen de Trigo y Vainilla, portantes de vitaminas E y oligoelementos, extractos de Rosa, Malvavisco y Avena, que aportan suavidad y ayudan a la regeneración celular y de Arándano, rico en antocianos, que descongestiona, estimula la micro-circulación y aumenta la resistencia de los capilares, refuerza las características de este producto. Potenciado, además, con Extractos de yemas y médula de Bambú que aportan aminoácidos (proteinas), vitaminas y oligoelementos como el silicio que fortalece los tejidos y les confiere flexibilidad. El importante aporte de Silicio y el respeto a las funciones naturales de la piel van a prevenir la aparición de arrugas y estrías. FUNCIONES DERMOCOSMÉTICAS: Hidrata, aportando mayor elasticidad y resistencia a los cambios externos. Acción emoliente. Nutre en profundidad, mejorando el drenaje de impurezas de la piel, así como la respiración celular. Suaviza la epidermis, recuperando y unificando el tono de la piel, gracias a su aporte de vitaminas. INDICACIONES: Para todo tipo de piel, incluido contorno de ojos y labios. En pieles normales, incomparable efecto de mantenimiento y prevención. Muy adecuado para pieles con tendencia alérgica a otros cosméticos. Alivio de la piel seca y deshidratada. Pieles atópicas y poco luminosas. Protección de la epidermis frágil y sensible a cambios de temperatura. Poros dilatados. Apoyo eficaz a pieles con cuperosis, descamaciones y dermatitis. RECOMENDACIONES: Si se aplica sobre la piel previamente humedecida con LECHE VIRGINAL BAMBÚ, maximiza sus beneficiosos efectos. Es preferible aplicar pequeñas cantidades de crema y con mayor frecuencia, dada la capacidad limitada de absorción de la piel. Imprescindible en viajes (cambios climáticos, polución, ...), aporta elasticidad y resistencia.